Claudio Pedreira: Canciones de un Crack

Esas noches de lluvia tienen algo especial con la música. A uno no le pinta tanto bailar al son de la cumbia, o poguear algún metal. Esas noches incitan a escuchar canciones. Crack es el nombre del nuevo disco de Claudio Pedreira, y ese quiebre, ese ruido que hacemos al pronunciar el nombre de su disco, desglosaba perfectamente una noche de canciones.

La Sala Crash de Palermo se rockeaba con canciones desde temprano con la presencia de los muy jóvenes Hijos del Limbo. Directos desde la zona norte del Gran Buenos Aires, los muchachos regalaron bellas canciones envueltos en un rock que subía y bajaba en intensidad. Buen prólogo para el plato principal de la jornada.

Claudio Pedreira es un músico con una larga trayectoria en el rock argentino de canciones, desde sus comienzos en los años ’80 con la banda olavarriense Can Can, que hoy en día cada tanto vuelve a los escenarios de su ciudad y reúne a miles de nostálgicos. Su carrera solista tuvo un gran debut con Quien (2012), de muy buenas críticas, y ahora llega el momento de Crack.

Con un muy buen grupo de músicos que acompañaron en el vivo, el cantante empezó con el tridente más efectivo de su nuevo trabajo. “Falso”, “Esdrujuland” y una exquisita letra de palabras esdrújulas, y el tema que da nombre al disco. Comienzo perfecto para resumir de que la iba esta novedad discográfica.

Enseguida llegó el mejor momento de la noche, con Bernie Cordero como invitado, quedando a solas con Pedreira, en una cálida y sentida versión de la canción “Añatuya”, perteneciente a su primer disco. Exquisito. Pegado, ya con la banda completa, “Circo Beat” fue el primer cover de la jornada hasta que llegó «Total interferencia» de Charly García.

El final guardó las dos canciones que más movimiento tuvieron del disco anterior: “Circular” y “Quien”, dueñas de unas letras dignas de ser escuchadas y repensadas. La primera más existencialista y la segunda más contestaría y para afuera, expulsando preguntas sin respuestas de sucesos de esta sociedad.

Una más pidió el público y “Una más” fue la canción del cierre, entre aplausos constantes. Otra buena obra de Claudio Pedreira fue presentada y la Sala Crash del barrio de Palermo fue testigo de una noche de grandes canciones. Esperamos con ansias muchas más.