Buenísimo: Nadie quiere bajar
Entrar a un recital tocando timbre no tiene precio. La Cultura del Barrio es atracción por sí sola. Y más un jueves, en este infierno de ciudad, aislarse de toda la mierda vertiginosa, conformista y capital. Ingresar al patio de la casona, pedirse una cerveza, perderse en la feria independiente del Rey Larva, y que…