Transformación. Tal vez sea una buena palabra para definir este año de Sobreviento en el que la banda se aprontó a producir y grabar su nuevo trabajo discográfico, que verá la luz en 2019. “Estamos en tiempos en donde no hay que buscarle mucha vuelta a las cosas. Es empatía de forma directa o andar ahí en una nebulosa metafórica y cósmica que no interpela”, explica el bajista Sebastián Verdún, acerca de esta actualidad de la banda. “Llevarlo todo hacia un plano más transparente y directo fue todo un desafío y eso es lo que queremos mostrar a partir de este show en adelante”.
El show en cuestión es el del viernes 30 de noviembre en El Emergente, mismo lugar que sirvió también para cerrar los dos años anteriores. “La fecha que se avecina es muy especial por este hecho de que vamos a estar adelantando muchas cosas de nuestro nuevo disco. Estamos llevando un proceso de transformación desde que empezamos a hacer este nuevo material, dese el mensaje, la música, la interpretación, la conexión entre nosotros mismos y con la gente que nos viene a escuchar”. También remarca la importancia de generar un grupo de trabajo acorde a la actualidad: “Estamos en un momento en donde es muy importante contar con este equipo que nos apoya para poder estar concentrados directamente con la música y lo que queremos transmitir”.
-Al mismo tiempo, hace poco grabaron para un proyecto llamado 8 Tracks, ¿cómo fue esa experiencia?
-Cuando Leo Fucci (crack total) nos hizo la propuesta fue medio raro. ¿Grabar en cinta? ¿Ocho canales nada más? ¿Sin Protools ni nada digital? Para nuestra generación de musiques es algo completamente desconocido o inusual, pero a la vez muchos de los discos que más amamos se grabaron con esa metodología. ¿Por qué no? Fue una experiencia que, además de ser el puntapié de empezar a grabar cosas nuevas, nos sirvió mucho a la hora de entender que administrar los recursos en función de las limitaciones y virtudes que ofrece el medio en que las hacemos siempre es lo mejor para las canciones. Ese criterio y manera de vivir el proceso como músicos después lo aplicamos a la hora de grabar las canciones de nuestro disco. Quedamos muy contentos con el resultado.
-¿Cómo se está llevando todo el proceso del nuevo disco?
-Lo vivimos como un sueño, tenemos la dicha de contar con Juan Saraco en la producción artística y su acompañamiento espiritual desde el minuto cero. Desde hace un año y medio venimos trabajando con él en esta búsqueda de nuevos decires y sentires que sentimos que van más con lo que queremos mostrar de la banda hoy. También contamos con Maxi Forestieri en la ingeniería de audio y arte sonoro del disco y con Micaela Vita en la producción y coaching de voces. Estar trabajando con gente que nos conoce muy bien y que admiramos mucho para nosotros es el mejor regalo de este proceso.