Hay momentos en la vida que nos llegan (Nota para el editor: voy a utilizar el recurso sacrílego para una crónica, voy a hablar en primera persona) y lo que premeditadamente pensamos como escenario de situaciones probables se desvanece por completo.
Tal fue así que me acerqué a Makena con los recelos de alguien que partió sin cerrar un capítulo. Última Caída se formó en 2011 y yo fui guitarrista de la banda hasta fines del 2015. El resultado de esta formación, además de demos y un EP, fue Celda De Papel disco debut lanzado el año pasado.
Como continuación a las presentaciones del disco llegamos a este día con una novedad para mí: ya no estaba allí arriba y tenía una gran expectativa. Con una intro de mixturas y recortes de partes de todo el disco comenzaron para mi sorpresa con “Abre tus Ojos”, un tema aún no editado con una letra profunda sobre la mujer y su dignidad ante el mundo machista. Le siguió con un lindo reconocimiento para mi persona “No Me Rendí” dando por sentado que el ADN rock y el pop en Última Caída siguen conviviendo en armonía natural.
“Come On Boy” es el momento Pop bailable de la noche en el cual la versión en vivo supera a la de estudio por amplio margen. Con el continuar del show con Nacho (voz y guitarra) al comando de un charango se dieron una vuelta por la muy reversionada “Si Te Vuelvo a Ver”, mechada con una celebrada versión de “Cuando Pase el Temblor”, apareciendo Cerati como una influencia notaria que siempre estuvo presente.
Sigo pensando que “Aquí Solo Hay Viento” es especial. Por letra, melancolía, potencia y música es mi favorita. En esos cuatro minutos quise volver a estar tocando, como así también cuando entrando a la parte final apareció el temazo “Tanto Veneno”.
Ya había sonado un rato antes una gran versión de “New Sensation” de INXS y al final llegó una confesión:“Vamos a cometer el pecado de cerrar con un cover”. “Personal Jesus” de Depeche Mode concluyó la noche con lo ochentoso como centro temático e influencia marcada.
Ignacio Bolivar es el arquitecto de esta estructura. Desde que ingresó a la banda todo empezó a tener sentido. Organizativamente ni hablar, musicalmente sus raíces en el pop nos sacaron la cabeza del termo rockero en que estábamos metidos. Además de ser autor de muchos temas y un gran escritor, le ha sumado a su repertorio un gran histrionismo en el escenario.
Luciano D´Andrea (bajo) es el pilar de la estructura, un trabajador incansable, emprendedor, entusiasta. Una guía musical e intérprete de nuestros caprichos. Siempre con una predisposición para la creatividad, con aportes esenciales de temas y letras que ayuda a que todo sea más camaleónico
Julian Gutierrez (batería) se sumó como una inyección anímica fundamental. Era necesario después del desgaste típico de la grabación de un disco autogestionado, sumar a alguien con el espíritu que el irradia. Desde el costado musical fue el acierto más grande porque tomó naturalmente y le dio su perfil a los temas.
No es sencillo escribir de alguien que te reemplaza. La música no es una competencia, no hay mejores o peores, rápidos o lentos. Santiago Lentino es un gran guitarrista y su estilo encaja perfectamente a lo que pedía el grupo.
Última Caída nació como una banda de rock clásico pero a lo largo de los años fue mutando hacia una versión de pop rock que puede flexibilizarse y no tener preconceptos artísticos. Hoy son una propuesta atractiva para los que están aburridos de oír cosas que se parecen a otras.
Nota del escritor: Las vivencias y los caminos que ahora se bifurcaron no quitan el hermoso viaje que fue participar de un grupo de buena gente que tiene como objetivo crear artísticamente algo nuevo, tratando de llegar a todo el mundo. Haber formado parte de esta historia es algo que me enorgullece. Ahora sí puedo sumarme como un fan más.
FOTO: Gentileza Marcos Napolitano.