Una banda presenta su disco debut. La heterogeneidad del público es bien notoria: fans, amigos, familiares, compañeros de trabajo, vecinos, prensa y más. Todos valen a la hora de sumarse a semejante acontecimiento. No todos saben sin embargo lo que cuesta llegar a cumplir ese show. El disco debut tiene esa magia de la primera vez, que se topa con una interminable lista de escollos que se van presentando. Todo está buenísimo esa noche pero el público poco sabrá todo lo que se sudó para llegar ahí. Horas y horas de ensayos, de producción, de grabación, de reuniones, de decisiones, de tareas extra musicales que nunca se acaban. Esa es la magia de la música: la hora y pico de show son canciones que pueden entrarle al que escucha de distintas maneras sin este pensar ni un instante en como ellas llegaron a presentarse ese día.
Esta ocasión fue el show de Última Caída en Liverpool Bar el pasado sábado 7 de noviembre. Ante un recinto completo, la intro bolichera nos atrapó en el mundo del pop y rock que ofrece el cuarteto (esta noche con teclados sumándose a la puesta en escena). Así fue que “Si te vuelvo a ver” inauguró la jornada seguida de “Rompecabezas” y “No me rendí”, para mostrar de entrada la propuesta musical que engloba la banda.
El pop volvió a pisar fuerte con “Come on boy”, la balada llegaría de la mano de “Rescatame”, y los destellos más oscuros e interesantes asomaron en “Club social” a través de la guitarra de Pablo Berenstein y en el cuerpo de “Traicionera” comandado por la voz de Ignacio Bolivar. Hubo tiempo también para un cover: el elegido fue “Personal Jesus” de Depeche Mode, recordándonos lo repetitivo que era el viejo tema ochentoso (aunque fue editado en 1990).
Previo a un intermedio que mostró el backstage de la grabación del disco y también sirvió para un cambio de vestuario, el lento “Y aquí solo hay viento” generó de uno de los mejores climas de la noche contagiando al público desde el estribillo.
Para el final quedaron el tema que cierra el disco, «Causal de sueños», y el que lo abre y a su vez es el primer corte, el más arengador y el de estribillo más comprador, “Tanto veneno”, que despertó algunas tímidas manitos arriba de un público que se mostró en casi toda la noche más a la expectativa y acompañando con aplausos.
Con creces fue cumplida la presentación de Celda de Papel (2015), disco debut de Última Caída que el próximo viernes 4 de diciembre tendrá una nueva oportunidad de ser escuchado en vivo en The Roxy Live del barrio de Palermo. Los agradecimientos se cumplen, los abrazos posteriores con el público se consolidan y seguirá un camino que tendrá mucho por delante. Más ensayos, más reuniones, más decisiones que tomar, más escollos y por supuesto, más shows para que la magia haga lo suyo y fluyan las canciones.
FOTO: Francisco Hernán Justiniano.