Vertaramo Trío: «Cada vez más gente toca y escucha blues»

Hace unos años ya que el blues local está volviendo a pisar fuerte en la ciudad, acompañado por músicos que viajan por todo el mundo y que encuentran acá una buena respuesta a partir de grandes interpretaciones y discos. Verteramo Trío ejemplifica todo esto y más a caballo de su disco debut que será presentado el próximo 7 de abril en el Conventillo Cultural Abasto.

“Estamos muy ansiosos”, reconoce el baterista Germán Pedraza. “Es la última presentación del Trio antes de irnos a Europa y estamos tratando de ensayar todo lo que se puede para brindar un lindo show. Va a haber muchos invitados, queremos que suene de primera y todos se sientan cómodos arriba del escenario”.

-¿La anterior gira por Europa funcionó como un disparador para la edición del disco?

-No, fue un disparador de muchas otras cosas que hoy nos vienen pasando de las cuales estamos muy contentos, como por ejemplo querer traer músicos de afuera para conocer y generar un ida y vuelta de esta música que nos encanta. Sin embargo, es verdad que la gira nos dio mucha confianza para llegar y sentarnos a grabar: habíamos tocado más de quince veces juntos en otro continente, viéndonos las caras todos los días, armando y desarmando equipos.

-Acompañaron a muchos artistas por distintas partes del mundo, ¿en qué plano sienten que más les enriquecen estas experiencias?

-Yo creo que cada experiencia es única. Nunca hay dos iguales. Haber tocado con tantos diferentes artistas nos genera una inmensa felicidad y creo que no sólo nos enriquece musicalmente, sino también en lo personal. Cada artista con el que compartís un escenario transmite energías que te transportan a diferentes lugares. Hay músicos que te hacen tocar mejor o sentirte más cómodo por el porte y la manera de dar un show y otros con los que por ahí musicalmente no te sentís tan ensamblado, pero las risas y las anécdotas detrás del telón son impagables.

-¿Hay algún artista que los haya sorprendido más de lo que hubiesen pensado?

-Estábamos en nuestra segunda noche en Viena, habíamos tocado la noche anterior y fuimos invitados como espectadores por el organizador del Viena Blues Spring Festival a otra fecha del mismo. Tocaba Christian Dozzler, que festejaba 40 años arriba del escenario. Fue increíble. Nos agarrábamos la cabeza por la tremenda banda que estábamos viendo y escuchando, riéndonos con complicidad por algunos ‘yeites’ que escuchamos que simplemente nos transmitían felicidad. Cuando terminó el show nos contaron que eran todos miembros de la Mojo Blues Band, una legendaria banda austriaca de blues. Otro artista que nos gustó mucho fue Erich Church, un bajista de Francia que nos armó la movida allá. Luego de haber tocado la primera entrada en Toulouse con Eric de espectador en el medio de una muchedumbre, nos dio ganas de que se suba al escenario con nosotros. Tocó dos o tres temas, pero hacía mucho que no escuchaba un bajista tan pesado como Eric. Tocando con un bajo que no era de él, incómodo por la cantidad de gente y sin su sonido, era obvio que tenía mucha experiencia porque sus líneas de bajo fueron motivo de muchas sonrisas arriba del escenario.

-¿Cómo ves al circuito de blues en el país?

-Hoy en día el circuito está creciendo de a poco. Por suerte hay muchas bandas emergentes que tocan y escuchan blues de todos los colores. Lo lindo de esto es que, si bien a nosotros nos gusta el aspecto tradicional del estilo, en la música cualquier toque personal la transforma en algo honesto y eso es algo que, como cualquier estilo, el blues necesita. Hoy en día creo que un aspecto fuerte del blues en la Argentina es el apoyo mutuo en el circuito. Somos varios, y cada vez más que tocan y oyen blues y generan movida para que todas las bandas que vayan apareciendo puedan tocar o tener más lugares dónde ir a escuchar la música que nos gusta.