Matasiete: «Hoy en Capital no existe un circuito como en los 80»

Matasiete presenta su nuevo trabajo discográfico, La Lotería de Babilonia, este viernes 21 de agosto en La Trastienda. El cuarto disco de esta banda que ya recorrió más de trescientos escenarios, se cubre bajo un concepto que  la propia banda define una relación con “el destino y el azar”. El cuento de Jorge Luis Borges es lo primero que se viene a nuestra mente, donde los destinos se dirimen por sorteo. “Estos son manejados por una compañía desde las sombras. El escuadrón de la suerte sería un grupo de personas que no sabemos bien en que plano y con qué fin modifican o corrigen sucesos para provocar otros. Lo que hicimos fue mezclar un poco los dos conceptos”.

– ¿Cómo fue todo el proceso de grabación?

-El proceso de grabación fue parecido a los primeros discos. En Snob, el disco anterior, las grabaciones fueron más bien de la banda en vivo. Hubo muy pocos Overdubs. En los anteriores y en este último no se tuvo tanto en cuenta la futura reproducción en vivo. Se incluyeron invitados e hicimos bastantes sobre grabaciones. Para nosotros es un disco que respeta la esencia pero bastante ecléctico. Es un disco difícil de encasillar.

– Este álbum llega luego de una trilogía pautada desde Snob en 2008.¿Sentían la necesidad de una conceptualidad para la elaboración de un cuarto disco?

-No. El concepto nunca tiene que ver desde lo estrictamente musical. Por lo general, el hilo conductor tiene más que ver con cuestiones externas que con una línea artística. En este caso, partimos de una idea audiovisual pero esa idea no se encuentra necesariamente plasmada en todas las canciones.

-¿Cómo va a ser ese pasaje al vivo en el show de La Trastienda? ¿Qué se puede adelantar?

-Llevó bastante tiempo adaptar algunas cosas, aunque en La Trastienda trataremos de respetar lo más que se pueda el audio del disco. Habrá bastantes invitados y esperamos que los que ya tienen algunas escuchas del disco encima queden conformes.

– La banda nace en un momento complicado para el rock argentino, ¿cómo sobrellevaron esos primeros años? ¿Cómo ven la situación actual de la ciudad en cuanto a los lugares para tocar?

-Esta banda nació post Cromañon y el país devastado en todos los sentidos. En aquellos años se decía que artísticamente se estaban gestando cosas importantes que después nunca aparecieron, al menos desde la música. No había recursos para grabar, tocar o comprar instrumentos. Era incluso difícil juntarse a ensayar. Y además, en Capital cerraron todos los lugares que estaban habilitados precariamente. Es decir, todos. Tardó algunos años en re acomodarse. Si es que alguna vez se reacomodó. Hoy en Capital, no existe un circuito under como en los ’80. Por eso decidimos salir al Gran Buenos Aires e Interior del país. De esa forma hicimos más de 300 shows en pocos años tocando jueves, viernes, sábado y domingo en todo el gran buenos Aires.

– Con el transcurso de los años comenzaron a compartir escenario con varios artistas de renombre, ¿que piensas que les aportaron esas experiencias?

-Claro. En esas giras interminables también tocamos con muchas bandas consagradas. Eso sirvió para que nos viera mucha gente de distintos públicos y además nos dio experiencia para el vivo en cuanto al armado rápido en el escenario y la adaptación a tocar con lo que hay. Es bueno que las bandas emergentes puedan ser escuchadas por el público de bandas que ya tiene su lugar y nombre ganados.

-¿Cómo juega la búsqueda de la banda con el concepto de Matasiete, el nombre que ustedes incorporan en la personalidad de la misma (con todo lo que eso lleva, un símbolo de lo «bajo» que toma el poder, visto desde la mirada de alguien de la clase alta como Echeverría)?

-Antes de ser Matasiete, la banda fue durante varios años La Gran Siete. Y todos los integrantes somos del barrio de Mataderos, de Capital Federal. En algún momento que debimos cambiar de nombre por cuestiones legales elegimos Matasiete por que conservaba el número siete y por la relación con el barrio. En cuanto al personaje del cuento, obviamente también sentimos una identificación ideológica aunque no nos representa el lado salvaje.

– ¿Cómo sigue el camino de la banda luego de la presentación?

-Luego de La trastienda nos pondremos a terminar lo que fue la idea madre de El escuadrón de la suerte que son una serie de cortos en donde desarrollaremos mejor la idea del destino, el azar y los caminos de las personas. Esperamos poder tener para fin de año el primer capítulo. Además, saldremos a tocar por el interior del país y seguramente alguna fecha más en Capital Federal.