Not Very Funny: Autogestión en tiempos de trap

El sello autogestivo Not Very Funny pisa cada vez más fuerte en la nueva escena musical de la mano de mucho trabajo, producción, performance y buenas canciones. Con el rap y el trap comandando los estilos, todo surgió “de forma natural”, sentencian los fundadores Sebastían Méndez Vera (Kennedy) y Rodrigo Makluff (Bisherop), ambos de 22 años de edad, a la hora de retomar los comienzos hace ya cinco años.

Esa naturalidad los llevaba también a no encontrar la mejor manera de subir su música y entonces ir por la propia terminó siendo la mejor solución. Al momento en que empezamos a hacer música juntos apuntamos a esta dirección de manera implícita”, explican ambos artistas casi a coro.

La música de Bisherop y Kennedy encontró de a poco amigos, hermanos, y toda la crew comenzó a nutrirse cada día más hasta llegar a esta actualidad en la que plantan bandera también Lucky LS, Genezsi, Mueka y Farwell, cada unx con su propia impronta.

“Somos un grupo con un gran sentido de pertenencia y nos pareció necesaria la autogestión para que nadie pierda su identidad ni haya gente que de arriba nos diga qué podemos escribir o cómo tenemos que sonar. Esto queda bastante reflejado en la cantidad de estilos distintos que hay dentro del sello. Si querés escuchar algo nueva escuela tenés al Mueka o Farwell, para algo más abstracto a Genezsi y los vacilones van de la mano de Lucky. Cada uno trabaja en su elemento y no queremos que eso se pierda”. Resumen perfecto por parte de Bisherop y Kennedy acerca de la amplitud de las propuestas.

La gran familia es lo que resaltan una y otra vez. Un grupo de artistas bien unido que tira para adelante y que se sumerge en esta selva salvaje que es la industria musical pero desde su lado de autogestión y de ideas propias y bien claras. “Vemos todo lo que evolucionamos y la única palabra que podemos usar es ‘manija’, manijas de seguir creciendo, de mejorar en cada estreno y de realizar proyectos de mayor magnitud. Esta evolución no es solamente musical, sino que viene acompañada de una evolución a nivel personal. Se podría decir que muchas de las cosas que acarrea este camino nos hizo ver la vida de una forma diferente”.

Así entonces, entrando directamente ya a la música viajamos por el camino de cada artista. Bisherop lanzó en diciembre “Le tems file”, una canción bien introspectiva y con toques jazzeros en una base que fija cimientos a un constante escupitajo de delicadas palabras. Como dato de color,  acompaña la versión  en reversa titulada “Elif smet el”.

El mismo mes trajo lo nuevo de Mueka, hermano de Bisherop, titulado “Cara a cara #2”, un tema íntimo y personal, en el marco de un ciclo estilístico que propone el propio sello y que seguramente tendrás varios capítulos más. También Farwell (Federico Ruocco) lanzó otra novedad, la potente “Not another high track”, que el propio artista analiza su evolución: “en los primeros temas que hice sentía que todavía era Federico el que estaba cantando. A partir de este lo veo definitivamente a Farwell, viene con otras ganas, estilos y líricas, algo que creo que había asomado en mi anterior canción “Rockstar”. Su entrada al sello es un ejemplo perfecto de lo que pregonan: “somos amigos de toda la vida, ellos dieron los primeros pasos y yo me fui contagiando de sus energías y sus grandes letras hasta que escribí mis primeros temas y grabé por primera vez”.

Genezsi es Mariana Medina e ingresó al sello a través de la buena relación con uno de los fundadores que la animó a hacer su música y mostrarla, sumándola al grupo general. De sus canciones sobresale “Néctar” y la propia cantante nos cuenta acerca de la canción: “Se trata de amor, de animarse a darlo todo aunque no sepas que va a suceder después. Tiene mucho sentimiento y mucha incertidumbre. Añeja muchos momentos vividos como Mariana, los cuales Genezsi los plasma en el papel, dejándose llevar por la corriente, o en este caso, subiéndose a un tren sin rumbo”.

Lucky LS se sumó cuando el proyecto estaba en plena gestación y la primera canción que lanzó fue “Mírame”. “Fue mi primer paso en grande como artista. Me llevó un tiempo encararlo, ir a grabar, era todo un mundo nuevo pero a la vez excitante porque era lo que me gustaba y quería hacer. Le tengo mucho aprecio y, vale aclarar, que es de los géneros que más me gustan”. Los toques más bailables del grupo llegan desde sus rimas y este reggaetón es el ejemplo perfecto.

Por último, nos adentramos en la música del otro fundador, Kennedy. Escuchar la picantísima “Modo Buda II” es entrar un trance inacabable. Frenesí puro con una lírica que no para de escupir toda una perfecta declaración de principios.

El presente es potente y el futuro prometedor para los artistas del sello Not Very Funny. A estar atentos.