Mal Momento es la mejor banda del mundo, lo saben todos los presentes en Niceto. Nadie lo discute, como que las tetas de la barwoman son perfectas, redondamente cierto. Un promedio de edad más alto que lo común en recitales de punk rock ignora que presenciará el mejor de la historia. Una lluvia de hits celebró los 20 años del homónimo primer disco, y el cantante Hermann hizo recordar por qué casi todas las bandas de punk argentino le cantan al amor.
Los acordes de “El Borracho” dieron inicio a la lista de casi treinta canciones. Dos guitarras eléctricas, una acústica, teclados, todas las canciones sonaron a las revoluciones justas. Hermann tuvo una noche mágica: cantó correcto, animó la fiesta y volvió cómplice al público hablando entre cada canción. Se lo notó contento, satisfecho con la actuación, positivo. “Tengo 47 años, soy un muchacho grande, quiero vivir 47 más”, dijo apenas arrancada la noche ante Niceto lleno.
Sonaron todos los temas del homenajeado Mal Momento (1994). Además todo se registró para lo que será el segundo disco y DVD en vivo: It’s alive II. Iban once temas, el público coreaba el estribillo ya consciente de que presenciaba el mejor recital de la historia: “Te pido que la noche no acabe más, un beso y…”. “El diablo en el bar”, “El amor no es para mí”, “No te cruces más”, Mal Momento mostraba que no tiene temas de relleno.
Fue una noche de sorpresas. En la pantalla grande del escenario se estrenó el video clip del tema “Mar del plata”. Emotivo y con imágenes de la banda en giras, también permitió que Juan y Martín, integrantes que fallecieron recientemente, den el merecido presente en la reunión. Después subieron al escenario las ganadoras del concurso que permitía interpretar una canción en vivo junto a Mal Momento. Tres pibas con las caras pintadas tocaron en forma acústica “Ella otra vez”, aunque la interpretación solo sirvió a fines de cumplir con el premio.
Quizás en relación al título de la canción (Nada encontrarán), Hermann tiró un par de frases: “No le crean tanto a TN y Canal 13”, “Prefiero un Perón a…”. Se lo notaba encendido, entusiasmado, con ganas de hablar. Los hits seguían lloviendo: “En tu casa”, “Corazón negro”, “El teléfono”. La interpretación fue acertadísima toda la noche. Dándole el lugar justo a los teclados y a la guitarra acústica, Mal Momento logró que las canciones sonaran frescas, fuertes, bailables y melodiosas. La acertada velocidad de las canciones permitió que las letras se escucharan claras, se entendiesen hasta para quienes descubrían a la banda por primera vez. Hermann no podía esconder su alegría: “Muchas gracias a la vida por darnos estos momentos”.
Cuando finalizó el útimo, “Corriendo el riesgo”, el público aplaudía y no quería irse. Hermann se despidió: “Viva Buenos Aires, Argentina. Tenemos los mejores músicos, a Gardel, que es uruguayo como yo”. En el escenario se ensayaba las fotos de rutina para el futuro disco. La mejor banda del mundo terminaba el mejor recital de la historia.
FOTOS: Federico Otto Gaubeca.
